Las estrategias de afrontamiento.
Marco Moretti
Tener una estrategia de afrontamiento es una necesidad.
Es la manera en que un organismo se mantiene estable en un mundo experiencial que genera un normal desequilibrio.
Es tan indispensable como respirar.
Nosotros usamos estrategias de afrontamiento cuando salimos a caminar después de un día difícil, cuando reorganizamos un espacio para sentirnos mejor, cuando nos apoyamos en alguien que nos da seguridad.
Nuestros perros también. Pero, a diferencia de nosotros, ellos no siempre tienen algo o alguien que les confirme que “esto pasará”. Solo cuentan con su cuerpo, su percepción y las estrategias que han desarrollado a lo largo de su vida.
No es la situación en sí lo que define qué estrategia usará un perro, sino su vivencia subjetiva.
Lo que para uno pasa desapercibido, para otro puede ser un reto. Lo que uno gestiona explorando, otro lo hace evitando.
No hay respuestas universales, hay repertorios individuales.
Algunos mastican, otros buscan moverse, otros necesitan compañía y otros evitan. También hay quienes escarban, sujetan un objeto, marcan con orina, hacen “croquetas”, o presionan su cuerpo contra una pared.
No son manías ni hábitos sin sentido: son estrategias de afrontamiento.
El problema surge cuando su margen de maniobra se reduce. Cuando cortamos sus intentos de forma constante, su repertorio de estrategias se empobrece.
Y sin estrategias viables, reequilibrarse deja de ser una opción.
A veces, estas estrategias nos resultan incómodas: si escarban en nuestras macetas, si sujetan nuestra ropa, si marcan dentro de casa. Pero hay que encontrar un equilibrio entre la convivencia y la necesidad real que hay detrás de estas acciones.
Muchas veces, en nuestro intento de evitar algo que nos incomoda, les quitamos una herramienta de re-equilibrio emocional indispensable para su bienestar.
Muchos perros podrían sentirse más seguros al percibir y gestionar sus experiencias si no tuvieran un acceso limitado a estas estrategias.
Sin darnos cuenta, las restringimos, no porque queramos limitarlos, sino porque desconocemos lo esenciales que son para su estabilidad.
Procuremos que las tengan.
BIENESTAR
Mejoramos la vida de tu perro juntos.
Pelutopia
¿Cómo podemos ayudarte?
hola@pelutopia.com
+34 666 710 968
© Pelutopia. All rights reserved.