El árbol del bienestar
Marco Moretti - Giorgia Crescenzi - Giuseppe Fatone
Sentimos la necesidad de dar una nueva forma al concepto de bienestar de los perros, de superar la forma piramidal habitual y crear una forma más completa y adherente a la etología y personalidad del perro.
El árbol del bienestar sigue un camino circular dentro del cual cada elemento tendrá su propio papel y será fundamental en la sinergia de todo el sistema.
Las raíces del árbol representan los cimientos, las necesidades de las especies, a lo que se apoyará el correcto crecimiento del árbol. Las raíces deben ser sólidas para dar estabilidad y fuerza. Por lo tanto, representan el vínculo correcto de apego, el entorno seguro y estimulante para el crecimiento individual y las buenas relaciones familiares.
A partir de las raíces se desarrollará el tronco que representa el conjunto de necesidades individuales. La sección del tronco tiene diferentes capas, cada una de las cuales tendrá una función y un valor específicos. Las capas internas representan la energía del flujo de emociones, la activación emocional (arousal) y los varios impulsos.
Más externamente, se encuentran las características del individuo, que deben reconocerse y respetarse para permitir que se desarrolle correctamente (ej. respecto por los tiempos individuales).
Todos estos elementos internos se mantienen unidos por una buena relación con los referentes sociales, lo que permite el flujo de todas las características subjetivas y favorece el respeto y desarrollo del individuo dentro de la propia relación.
En la parte más exterior y expuesta está la corteza, la envoltura que protege el corazón del árbol y representa el bienestar físico del sujeto. Por lo tanto, es esencial cuidar la corteza, mantenerla fuerte y saludable para que pueda proteger eficazmente los elementos internos del árbol (experiencias genéricas de crecimiento en la corteza – diferentes edades).
A partir del tronco se desarrollarán las diferentes ramas, que representan las infinitas experiencias posibles que vivirá el sujeto, siempre en relación con los diferentes vínculos socio-afiliativos que desarrollará. Las ramas darán forma y estructura a la copa del árbol de bienestar (experiencias de desarrollo socioafiliativas).
Sólo con un correcto proceso de desarrollo de toda la estructura pueden nacer las hojas y sus frutos, que representan los elementos fundamentales para el nacimiento y crecimiento de un sujeto equilibrado y sereno.
Las distintas hojas representan el autocontrol, la autoeficacia, la autoestima, el equilibrio emocional, la realización y, en conjunto, estos elementos – la copa – representan el logro del bienestar real y general del individuo.
@Cisne Negro Formación.
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